lunes, 23 de enero de 2017

Monólogos de una Ama de Casa I

Mi amplia experiencia como madre, educadora y y profesional del hogar me ha permitido desarrollar unos prácticos y muy aconsejables métodos de manejar ciertas tareas del hogar en las que muchas otras amas de casa se desesperan, anhelando un poco de tiempo libre y descanso. Aquí van dos.

Cómo planchar lo mínimo, o nada

1.Tender la ropa fuera.

2. Dejar la ropa colgada hasta que llueva.

3. Dejar que la ropa se empape.

4. Dejar la ropa tendida hasta que se vuelva a secar.

5. Repetir el paso 2 las veces que sea necesario.

6. Descolgar la ropa, que para ahora estará lisa, lisita como un lago en un día de verano, doblar, y guardar. (Puede que huela al pescaíto frito que hizo la vecina hace dos días).

7. Disfrutar de un café y una revista.




Gestión de sobras y tuppers

1.Meter las sobras en un tupper (léase "táper", la palabra fashion para la fiambrera de toda la vida). No preocuparse que la cantidad sea menor que una ración - guárdalo por si acaso.

2. Insertar el tupper en la nevera, preferiblemente en la repisa más alta y para atrás.

3. Echar una ojeada al tupper de vez en cuando, y oler el contenido con recelo si hiciera falta.

4. Cuando la cantidad de moho que se ha formado sobre el contenido del tupper es satisfactorio, desechar el contenido y lavar el tupper, o

4b. Meter el tupper otra vez en la nevera por un par de semanas más. Cuando el contenido sea demasiado repulsivo para manejarlo, tirar el tupper - y su contenido - directamente a la basura.

5. Cuando este proceso se haya repetido varias veces, disfrutar al máximo la emoción de adquirir un nuevo set de tuppers - de colores, apilables, coordinados, del chino, del Carrefour o del IKEA. Esta última opción es deseable ya que se puede combinar con una comida barata de albóndigas suecas con compota y un cargamento de velitas perfumadas. 




Quedo impaciente a la espera de vuestro feedback (léase "fídbac", otra palabra fashion que viene a significar comentarios) de cómo os han ayudado estos consejos de inestimable valor.

Eli Escuain

martes, 17 de enero de 2017

MIS CONSEJITOS PARA EDUCAR EN CASA -- parte II

En la primera parte de este artículo, mencionamos 6 consejos que me hay ayudado a lo largo de estos años que he estado enseñando a mis hijos en casa:


1. Ora antes de empezar
2. Ora diariamente
3. Ves a una con tu marido
4. Enseña de forma divertida
5. No te agobies
6. Planifica


Hoy quiero compartir con vosotras otros 6 más

7-¡CAMBIA EL CHIP! Educar en casa NO es solamente hacer en casa lo que se hace en el cole. Yo empecé con esa mentalidad, pero poco a poco me he ido dado cuenta de que educar en casa es algo más personalizado. En casa tienes la oportunidad de trabajar la MOTIVACIÓN del niño, enseñarle materia a partir de lo que le gusta, ampliar sus conocimientos de aquello que le interesa. Esto hará que DISFRUTE más del aprendizaje. En el colegio dificilmente se logra. 

8-DA PRIORIDAD A ENSEÑAR LA PALABRA DE DIOS. Ante todo somos hijas de Dios. ¡Eso marca la difencia en todas las áreas de nuestra vida! No sólo somos madres, sino que somos madres cristianas, y una de las razones por las que habrás escogido enseñar a tus hijos en el hogar es la de inculcarles valores cristianos (ausentes en el sistema escolar). Por tanto, no dudes en dedicar tiempo a enseñarles la Biblia para que puedan desarrollar un CARÁCTER CRISTIANO. ¡Ése debería ser un objetivo primordial en tu año escolar! 



9- ENSEÑA A PARTIR DE LA PALABRA DE DIOS. Esto puede sonarte algo difícil, pero es un reto que te propongo. En la Biblia hay muchísimo material que se estudia en los temarios escolares. Te amino a usar pasajes bíblicos y a partir de allí desarrollar los temas. 

Por ejemplo: en el libro de Job puedes encontrar pasajes para poder estudiar los dinosaurios, las constelaciones, el planeta Tierra, algunos fenómenos metereológicos; 
en Génesis 1 se registra la historia de la creación y a partir de ella se puede estudiar el universo, las estaciones, el reino animal, el reino vegetal y el ser humano; la liberación de Israel que cuenta Éxodo te puede ayudar a estudiar el Antiguo Egipto; la descripción del muro de la Nueva Jerusalén que se da en Apocalipsis te puede dar pie a estudiar el tema de los minerales. ¡Seguro que se te ocurren un montón de pasajes más! Trata de relacionar siempre que puedas lo que enseñas con la Biblia. 

10- TEN PRESENTE QUÉ APRENDEN LOS MÁS PEQUEÑITOS Y CÓMO: 

*De P3 a P5 se enfatiza mucho en los niños que adquieran hábitos y autonomía personal. Así que, el enseñarles a vestirse, recoger los juguetes, ir al baño, comer solos, decir gracias y por favor, rutina de acostarse, etc. ¡son parte del temario! (Ya tienes adelantado MUCHO sólo con eso).

*También es muy importante que aprendan a hacer cosas solos aunque se equivoquen o te "atrasen" a ti. Eso les dará mucha confianza como personas y seguridad. ¡Paciencia, muuuuchaaa paciencia!

*Los niños, especialmente los preescolares, aprenden a través de los 5 sentidos; así que, trata de buscar actividades que los involucren: leerles cuentos, ayudas visuales o videos, cosas que puedan hacer con sus manos, saborear alimentos, oler las flores… 


11- RECOPILA RECURSOS ONLINE. Muchas mamás me dicen que de dónde saco tantas ideas. ¡No hay misterio! ¡De Internet! No sólo busco en Google y pongo en mi carpeta de marcadores las páginas o ideas que me gustan, pero también uso Facebook para  navegar. Me explico. En Facebook no sólo estoy al día con mis amigos y familiares, sino que sigo un montón de páginas relacionadas a la educación y al homeschooling, de esta manera recibo diariamente un montón de ideas. No todas me gustan, pero me muchas me encienden la "bombilla" para enseñar alguna cosa en cuestión. Así que, te aconsejo que le dés a “Me gusta” a cuántas páginas mejor: de guarderías, centros familiares, asociaciones de maternidad, manualidades, educación, homeschooling, museos, colegios, etc.



Espero que estos consejitos te hayan sido útiles. Nos encantaría leer tus comentarios aquí o en nuestra página de Facebook. De todas maneras, estáte pendiente porque aún tenemos más para compartir :-) 

Noèlia Giner

sábado, 7 de enero de 2017

¿POR QUÉ NO CONTESTAS, SEÑOR?

Te ayudará mucho si lees Éxodo 6 y 7

Moisés llegó de tener un encuentro con Dios. Había recibido la gran promesa de que su pueblo iba a ser liberado. Aarón le acompañaba. ¡Israel escuchó la noticia con gran entusiasmo y emoción! ¡Dios había visto y oído el sufrimiento de ellos que por tantos años habían sostenido! ¡Por fin, podían ver próxima su liberación!

Sin embargo, después de divisar un nuevo amanecer para sus vidas y las de sus familias, el horizonte se oscureció. Faraón había dicho que ¡no! -- ¡que no dejaría marchar al pueblo! Interpretó la alegría de la gente como mera ociosidad. Así que decidió añadir más sudor y sufrimiento a su trabajo. Ahora tendrían que fabricar ladrillos de barro sin paja. No toleraría que la producción disminuyera; el trabajo debería seguir igual... ¡O más bien peor!

El pueblo de Israel se desmoralizó. Dios les había asegurado ser libres y de repente la esclavitud se hizo mayor. ¿Estaba Dios contradiciéndose? ¿Había perdido el control? ¿Cómo era posible que les diera una promesa tan bella y que ahora las cosas les fueran peor?


Nosotras conocemos bien el final de la historia. Milagro tras milagro, maravilla tras maravilla... ¡Dios les liberó con mano fuerte y poderosa! Pero ellos, en ese momento, desconocían el final. Las circuntancias les confundían. Si hubiéramos podido hablar con ellos desde nuestra perspectiva, seguro que les hubiéramos animado a permanecer confiando en el Señor. Les hubiéramos dicho que Él les sacaría, que tuvieran paciencia y no perdieran la fe.

Lo mismo ocurre en nuestras vidas. Oramos intensamente por algún motivo en concreto; tenemos las promesas del Señor. Sin embargo, muchas veces, a medida que oramos sin cesar, vemos como las cosas empeoran a nuestro alrededor y nuestra fe empieza a vacilar. Pero Dios conoce el final de nuestra historia y tiene en mente lo que va a hacer. Sólo pide de nosotras que no perdamos la fe. 

Y así fue, allí en Egipto: Dios venció a Faraón. Tenía un propósito definido y es que tanto egipcios como israelitas conocieran quién es Dios: Jehová el Omnipotente, Jehóva el gran Yo Soy. Dios no quiso meramente liberarlos (Él podría haberlo hecho sin más), sino que quiso mostrar Su fuerza, Su poder, Su autoridad. 

Sigue orando amiga mía, no desmayes al ver las cosas peor a tu alrededor. Es que Dios está obrando para que le conozcas mejor. Para que aprecies más Su fuerza, Su poder, Su amor. No hay mejor fondo que el de color negro para apreciar el brillo de un diamante en todo su esplendor. ¡Contra más difícil se ponga el camino, más grande verás al Señor! ¡Cuando llegues al punto de lo imposible, verás que todo es posible para Dios!

Noèlia Giner